Ramón Durán Rey
Jornalero de 27 años, natural de Alburquerque. Emparentado con Nicolás Sanguino Bueno. Un día se encontraba en un sandial de su hermana afeitándose junto a un árbol cuando escucharon los disparos de las tropas sublevadas. Intentó escapar pero fue capturado, montado en el campanillo (el camión en el que se transportaba a los condenados a morir) y asesinado la noche del 18 de octubre de 1936. Su sobrina Eugenia, que por entonces tenía 6 años, nos ha dejado el testimonio de su asesinato.
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